‘Casa IAIA’ es un proyecto especial, es la culminación de más de diez años de experiencia en el sector de la rehabilitación, más específicamente, en el sector residencial y la realización de un sueño, reformarte tu propio piso. Cliente y técnico se fusionan siendo una sola persona, con la suerte de contar con todo el equipo de Septiembre Arquitectura, para contrastar y potenciar las ideas.
Es curioso, cuando haces un proyecto, como técnico el proceso es claro, analizas objetivamente las posibilidades del espacio, escuchas atentamente las necesidades del cliente y se empieza a trazar un camino recto por el que se van definiendo todos los conceptos y detalles. Desde el punto de vista del técnico no hay dudas, la línea es clara, se necesitan y agradecen las pausas, donde uno puede tomar distancia para poder tener otro ángulo de visión y sobretodo, para escuchar más al cliente y entender sus incertidumbres. Pero cuando el proyecto es para uno mismo el camino está lleno de curvas, te conviertes en el cliente que no tiene claro que pieza escoger.
Por suerte en Casa IAIA, el proyecto se cocinó a fuego lento, el piso llevaba ya un tiempo vacío y no había una urgencia inicial para ocuparlo. Esto permitió irlo creando poco, encontrando y desgranando las ideas esenciales de las superfluas. Desdibujando las imágenes enamoradizas, de las que hoy en día estamos tan estimulados y que acaban contaminando el proyecto por estar descontextualizadas. Para quedarnos con la esencia, la relación entre los espacios, la configuración del edificio con sus ventajas y sus condicionantes, la funcionalidad, la eficiencia energética, la estética y un especial mimo en los detalles.
El programa funcional parte de una vivienda para 5 personas, donde se pueda disfrutar de grandes espacios y mucha, pero mucha luminosidad, casi en exceso, especialmente los meses de más calor. El punto de partida es un ático a tres vientos, orientado al sur-este y de planta casi cuadrada, dotado de una gran superficie acristalada por donde se alzan unas magníficas vistas de la ciudad, al mar y a la montaña.
El proyecto respeta la estructura funcional original, manteniendo en el centro dos cuartos de baño, que permiten separar claramente las zonas de uso. Por un lado, tenemos agrupada la zona de día con el acceso, la cocina abierta y un gran salón comedor, mientras por el otro tenemos la zona de noche, a través de un pasillo se da paso a tres baños y dos grandes habitaciones, una de ellas estudiada para dividirse en dos en un futuro próximo. Se plantean dos grandes retos funcionales, como solucionar la relación entre el espacio de acceso a la vivienda, la cocina y el gran salón comedor y redistribuir la suite con sus tres piezas, la zona de uso, el baño y el vestidor.
El primero se resuelve girando la cocina, separándose de la fachada donde se crea un acogedor espacio de office y protegiéndola con un gran mueble de madera de roble, que separa visualmente ambos espacios y a la vez hace de estantería hacia el recibidor. Este mismo mueble gira hacia el comedor, donde queda interrumpido por la gran encimera de la cocina creando así una zona de bar, permitiendo cocinar mirando toda la ciudad, pero que a la vez recoge la cocina creando intimidad entre los espacios. Para acabar de realizar esta solución, el recibidor se panela también con la misma madera del mueble, extendiendo así la materialidad y potenciando el juego de luz en los espacios más expuestos. Es decir, se accede por el espacio más recogido y cálido, que da acceso a dos grandes espacios interrelacionados y muy iluminados, la cocina y el salón comedor.
El segundo reto, la distribución de las piezas que conforman la suite, se resuelve des fragmentando el lavabo e invadiendo con la ducha el espacio de noche, esta se dibuja con forma de semiesfera, permitiendo así evitar esquinas agresivas que penetren en la habitación. Este gesto admite ocupar un espacio perdido por la circulación, a la vez que permite dotar a la ducha de vistas hacia toda la ciudad. Para acabar de consolidar esta distribución, el volumen se pinta de verde, haciéndolo protagonista del espacio y dividiendo de este modo la zona de baño con la de vestidor.
La propuesta de materiales es honesta, se realzan las soluciones constructivas originales del edificio, repicando los pilares de hormigón y dejándolo visto. En la cocina se opta por un granito blanco cristal, un gran clásico que, aunque tiene una gran relación calidad precio, hoy en día está en desuso. Este granito contrasta con la madera de roble de los muebles de la cocina y el suelo de grandes piezas porcelánicas, creando una estética elegante con un guiño ochentero. En el salón comedor se renueva la chimenea de mármol existente por una de pellets, que servirá para calentar esa zona los meses de invierno. Esta se instala sobre un mueble de hormigón, creando un juego con los pilares existentes. El sofá es el otro protagonista, se crea un gran mueble a medida, que organiza todo el espacio del salón, lo acompaña tres módulos tipo puff, que te permiten crear un gran sofá en L o jugar con los módulos como butacas auxiliares o reposapiés, creando un enorme “chaise lounge”.
Se respeta el suelo original, un parquet de roble que realza la nobleza existente. Para resolver el conflicto entre los diferentes tipos de madera y rebajar costes sin perder calidad, se juega con el DM barnizado como material protagonista de la zona de noche, utilizándolo en puertas, frentes de armarios y muebles escritorio.
Para proteger la vivienda de las pérdidas de calor por sus grandes superficies de fachada y de cubierta y al exceso de radiación solar, se cambian todas las carpinterías por unas de madera castaño con buena transmitancia, se provee de toldos exteriores o persianas orientables para las aberturas más expuestas y se aísla térmicamente todo el techo, a la vez, que se potencia la ventilación cruzada. Permitiendo de este modo reducir considerablemente el consumo energético. El resultado es un hogar de grandes espacios, que responde 100% a unas necesidades funcionales creando un espacio práctico para los usuarios sin renunciar a una estética personalizada y al confort.